Segundo día del retiro y el último día completo del Festival. Entre ocasionales, repentinos y cortos chubascos, el sol ha brillado sobre nosotros mientras continuamos haciendo brillar el sol de nuestra fe en la montaña nevada de nuestro Guía Espiritual, para sentir la lluvia de sus poderosas bendiciones inundando nuestros corazones y elevando nuestras mentes.
Kadam Morten nos ha animado a no fingirlo, sino a tomar tiempo para construir la intención profundamente compasiva de la bodhichita en nuestros corazones, siguiendo paso a paso las instrucciones que hemos recibido. Practicarla aquí, en este lugar bendito, con esta gran asamblea de amigos espirituales sinceros y de buen corazón, es más fácil.
Hay una fuerte sensación entre todos aquí que es hora de poner realmente las enseñanzas en práctica, que se conviertan en reales, para que sean auténticas. Eso es lo que se siente en el Templo durante las sesiones – una multitud de meditadores que se conectan con los mismos deseos puros, todos mezclando nuestras mentes con el consejo de nuestro Guía Espiritual de manera práctica: es muy poderoso meditar juntos. Como Kadam Morten dice, las bendiciones inspiradoras del Guía Espiritual son el viento en nuestras velas, que nos sopla ligeramente a lo largo del camino espiritual.
Por la tarde y por la noche, hemos meditado en la vacuidad. Dándonos cuenta de que el yo que normalmente vemos, limitado, impuro, que sufre, no existe, podemos entender cómo podemos realmente cambiar hasta el nivel más completo y liberador. Podemos ser lo que queramos ser: ¡podemos ser Budas iluminados!
Aunque la gente comienza a empaquetar sus cosas y a prepararse para irse, todo el Festival continúa funcionando: los cocineros continúan cocinando, los equipos de limpieza continúan limpiando, los asistentes en el aparcamiento continúan haciendo esfuerzos heroicos para evitar que los coches queden atascados en el barro – dondequiera que miremos, veremos las caras felices de los asistentes al festival que estiman a los demás. ¡Todo el Festival depende de la bondad de los demás!
Hacer estos trabajos del Festival nos muestra directamente en nuestra propia experiencia como el budismo moderno puede realmente funcionar en nuestra vida cotidiana. Tal y como Kadam Morten cita de Cómo transformar tu vida, “Actividades como cocinar, trabajar, hablar y relajarse no son intrínsecamente mundanas; son mundanas sólo si se hacen con una mente mundana. Haciendo exactamente las mismas acciones con una motivación espiritual, se convierten en prácticas espirituales puras”.
Al irnos mañana nos llevaremos esta experiencia especial que hemos conseguido en el Festival de vuelta a nuestros hogares y a nuestras vidas cotidianas. Podemos ser como la legendaria joya – que el venerable Gueshe-la describe en el texto – que purifica cualquier agua en la que se coloque. Al tratar sinceramente de mantener nuestros buenos corazones e intenciones puras y al practicar la sabiduría que nos identifica correctamente a nosotros mismos como mera apariencia, como vacuidad, traeremos paz y significado a todas nuestras relaciones, extendiendo compasión y sabiduría por todo el mundo.
¡Qué increíble regalo nos estamos llevando del Festival, para el mundo entero! Ésta es la gran bondad de nuestro Guía Espiritual, Venerable Geshe Kelsang Gyatso Rinpoche. ¡Gueshe-la nos ha dado directamente 40 años de bondad! Como dijo Guen-la Khyenrab, puede haber 50 años, 60 años, 70 años o 100 años!